Es posible que hayas tenido momentos, instantes en que te digas cosas como; quisiera un momento de tranquilidad, de paz, uff esto se me está haciendo difícil, no puedo con esto…
Pues sí; todos/as y cada uno de nosotros/as pasamos por estas circunstancias; donde no estamos viviendo, ni experimentando tranquilidad, sosiego y paz.
Tu ahora que estas leyendo mi escrito; a ti te digo; tu puedes participar en tu vida; y contribuir a crear en ti la paz que buscas fuera.
A continuación os dejo unas pequeñas ideas para acercarnos a la realidad de – si la paz es posible construirla – ¿puedo hacer un intento?; y son las siguientes:
1.- REFLEXIONAR: ¿Qué tipo de relación quiero conmigo misma y con los demás?
2.- OBSERVAR: Mis intensiones; para descubrir si estoy interesado/a en las necesidades de los demás como en las mías.
3.- ESCUCHAR: Cuando pido algo ¿Lo hago desde la exigencia?
4.- QUÉ BUSCO: ¿Tener razón o conectar con las necesidades y sentimientos de los demás?
5.- DECIDIR: En lugar de decir un NO. Puedo decir qué necesidades mías me impiden decir SI.
6.- SI SIENTO ENFADO: Preguntarme qué estoy necesitando y cómo puedo satisfacer mi necesidad; antes que culpar a los demás y a mi mismo/a.
Si en este momento estás en disposición de ahondar; nos acercaremos a cada una de ellas;
En este escrito; trataré el primero:
REFLEXIONAR; ¿Qué tipo de relación quiero conmigo misma y con los demás?
Cómo me relaciono conmigo misma; influye en gran manera en cómo me relaciono con los demás y con el mundo.
Por medio de estas preguntas podrás ir entrando en ver y descubrir cómo te relacionas contigo misma.
- ¿Qué te sueles decir, en su mayoría, cuando te equivocas; cuando no has podido realizar aquello que esperabas hacer?
- ¿Qué sentimientos tienes hacia ti, la mayor parte del tiempo?
- Sentimientos que brotan de una acogida cálida y comprensiva con tus pensamientos, con lo que sientes en este momento, con la situación que estás viviendo. . ¿O hay en su lugar más sentimientos que brotan de una exigencia, de un rechazo a lo que tus haces, dices o piensas?
Cada uno/a de nosotros/as podemos estar atravesando situaciones duras y difíciles y tener momentos de gran vulnerabilidad, momentos de tensión donde podemos llegar a experimentar estrés, desaliento. Por tanto, cobra relevancia; aprender a cuidar nuestra salud emocional en medio de toda situación; para responder desde lo mejor de quienes somos.
RECOMENDACIONES
Cuando la vida se nos hace cuesta arriba podemos:
- Comunicarlo a quienes nos rodean; cómo nos estamos encontrando; no solo da alivio sino es fuente para sentirte arropado/a y acompañado/a además de contar con la posibilidad de recibir alguna ayuda.
- Buscar momentos de descanso, de silencio; porque son en esos momentos donde nos damos cuenta cómo podemos estar. Y respondernos a las dos preguntas más arriba detalladas en REFLEXIONAR.
- Cuidar tu descanso y alimentación,
- Buscar ayuda profesional para que podamos ahondar más en tu salud emocional.
- Seguiré ahondando en estos pequeños pasos que podemos dar para construir la paz; tu paz tu descanso, tu bienestar.
Te dejo con esta pregunta
¿Quieres ser participe en construir la paz, tu paz?
Un saludo y hasta la próxima.
Elisa C. Garrido Carrión
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